Por: David Rincón / Julián S. Alba @LePrideX
Una tormenta cayó en Bogotá y prendió fuego a La Aldea, que se mantuvo caliente a pesar del frio capitalino, entre las melodías, anécdotas y cantos que trajeron para nosotros: Volando solo, Apalatxe y Kike Tormenta (Todo o Nada).
La cuota capitalina fue Volando solo quien entre unos cuantos tragos hizo suspirar las cuerdas de su guitarra que cantaba junto con él en cada melancólica y dulce canción que entrañaba en el sentir de sus acordes y letras. Apalatxe nos trajo desde el País Vasco un repertorio de canciones con un gran mensaje crítico y muy íntimo por parte del cantautor que muy pocos conocíamos, pero que nos sorprendió e hizo recapacitar con cada una de sus melodías, tras su impecable presentación.
Kike trajo consigo la Tormenta, una muy emotiva presentación que puso nostálgicos a todos los presentes, que cantaban cada canción con alma y corazón. Temas ya conocidos del antes Todo o Nada o incluso aquellos temas que recordábamos del Paso a Paso de antaño, hasta los nuevos temas que dejaron perplejos a los asistentes quienes estuvimos muy pendientes de la calidad y la exactitud de sus palabras en cada letra que nos era tan ajena y tan familiar al mismo tiempo.
Y así, a pesar del frío, de su notoria tos, de los típicos percances con las cuerdas que huían rotas por la euforia con que se tocada cada acorde, fue más grande la pasión y la energía del público y de Kike, que no permitió que nada opacara este recital y que con un emotivo abrazo final terminó esta mágica noche complaciendo a cada uno de los asistentes… “Todo ahora o nada para siempre.